¿Cuál es nuestro objetivo como educadores?

Nuestro objetivo y compromiso es PREPARAR a nuestros niños, niñas y adolescentes PARA LA VIDA. Aspiramos a que COMPRENDAN E INTEGREN de manera definitiva todos los conceptos curriculares con los que trabajaremos durante su etapa educativa, y que, además, cuenten con las HERRAMIENTAS necesarias para ser creativos, analíticos, empáticos, libres, resolutivos y eficaces. Trabajamos para que sean personas seguras, con conciencia ambiental, con capacidad de expresarse, de elegir, de enfocarse hacia aquello que desean. Ellos y ellas serán las personas que la gente querrá tener cerca personal y profesionalmente y, lo más importante, tenemos la certeza de que se conocerán a sí mismos, con sus talentos y limitaciones, sabrán lo que quieren, lo que les gusta. Representarán aquel colectivo tan selecto y envidiado que es FELIZ porque hace LO QUE LE APASIONA.

Cuéntame y olvidaré, enséñame y puede que lo recuerde, involúcrame y aprenderé

Benjamin Franklin. (1706-1790) Político,
científico e inventor estadounidense.

Sí. Con el código 07015689. Para nosotros es importante formar parte de los colegios homologados que ofrecen planes de innovación pedagógica.

Un maestro Arimunani es una persona apasionada por el cuidado y acompañamiento de cada uno de sus alumnos, orientada en hacer ver a cada uno sus potenciales. Es una persona que además de mirar, sabe VER, que no ha parado de aprender y se preocupa por ser su mejor versión. Le gusta trabajar en equipo, crecer personalmente y está abierto a cambios. En Arimunani les llamamos “acompañantes” porque guían el aprendizaje activo y personalizado de cada niño, niña o adolescente.

Tienen formación de licenciado, graduado, normalmente en magisterio y en pedagogías activas no directivas, y educación respetuosa. Son personas con una actitud de compromiso y dedicación hacia los niños/as. De gran calidad humana, vocacionales, con ganas de crecer, aprender y formarse constantemente. Cada martes tenemos un espacio de formación continua en el mismo colegio.

En una escuela activa, los alumnos/as son los protagonistas de su propio aprendizaje. Ellos/as deciden, junto con sus acompañantes que les guían, la manera y el momento de abordar los contenidos.

 

Una escuela respetuosa prioriza el ritmo de aprendizaje de cada niña o niño atendiendo su verdadera necesidad, que no su deseo. A la vez, el propio desarrollo de los alumnos/as se da a través del entendimiento y la negociación, esquivando el castigo, los premios, las amenazas y otras dinámicas que generan distancia y desconfianza en el vínculo de aprendizaje.

La ratio máxima es de 12,5 alumnos/as de la misma edad por acompañante.

Con el fin de respetar los ritmos de cada niño y enfocados en el AVANCE del grupo en sus procesos de adquisición, creamos GRUPOS DE APRENDIZAJE en todos los niveles educativos. No importa que las edades sean heterogéneas, de hecho, ahí radica, a nuestro modo de ver, la verdadera riqueza del aprendizaje, el respeto por la diversidad y la cohesión que nos distingue como escuela. 

 

Este patrón de trabajo fomenta el sentimiento de PROGRESO y la autoestima del niño o niña versus la frustración que puede suponer sentir que no puedes seguir al grupo por una barrera lingüística, por ejemplo, o por no encontrarte en el estadio de desarrollo matemático que pueda tener el grupo en ese momento. De esta manera, convertimos un posible bloqueo, o enfoque negativo del aprendizaje, en un ESTÍMULO u OPORTUNIDAD para seguir creciendo y avanzando.

Las emociones, al igual que las necesidades físicas o académicas, son atendidas por nuestro equipo en todo momento. Los/as acompañantes están formados/as para ayudar a los niños/as a gestionarlas según sus necesidades y a autorregularse.

Además, en determinados momentos como las asambleas y algunos talleres específicos, se enseña y se trabaja sobre las emociones, la importancia de reconocerlas y transitarlas. Es un contenido que abordamos en todas las etapas educativas incluida la adolescencia, momento crucial en el que afloran nuevos sentimientos desconocidos hasta el momento.

Un conflicto es cualquier situación en la que dos o más miembros de la comunidad educativa entran en cualquier tipo de discordia.

Los conflictos forman parte de la vida. Son un proceso más de aprendizaje. Cuando se dan, tratamos de dar herramientas para manejarlos con un fin sanador para ambas partes.

 

La forma que tenemos de abordarlos es bajo una mirada respetuosa. De esta manera, cada uno/a puede ver cómo se ha sentido el otro/a y puede manifestar la necesidad que tiene en ese momento. Así abordamos una manera pacífica y regeneradora que potencia los vínculos y la convivencia.

Suprimimos los libros de texto como tales, pues ayudamos a los niños/as a construir la información que necesitan, a través de múltiples medios, ya sean escritos, tecnológicos o experimentales.

No, siempre hemos pensado que la jornada lectiva debe ser la jornada de trabajo académico. Como cualquier adulto después de su jornada profesional necesita despejarse y descansar, los niños y niñas también. Nuestro objetivo es que el tiempo que pasan en el colegio sea lo más eficiente posible.

Solamente en algunos casos concretos y de secundaria, proponemos a las familias el trabajo en casa de algunos aspectos en particular.

Las niñas y niños tienen sus propios ritmos de aprendizaje y períodos de interés en ciertas áreas. Nosotros/as acompañamos esos intereses a la vez que observamos desde la perspectiva del profesor, lo que el niño o la niña ha de ir adquiriendo.

 

Cuando el interés en un área específica está en pleno auge, lo potenciamos sin dejar de perder de vista que las otras áreas se tendrán que ir trabajando en otros momentos. Por ello, guiamos al niño o niña en su avance curricular invitándoles a asistir a talleres de las áreas que en este momento no llaman tanto su atención para equilibrar sus aprendizajes.

Ante todo, debemos tener en cuenta que, de forma natural, el niño o la niña tienen una curiosidad innata e interés por aprender. Cuando esto no se está dando, hemos de averiguar el motivo. Así que, mientras adaptamos el horario a cada necesidad, trabajamos con todo el equipo y la familia para ver las causas y las posibles soluciones.

Creemos firmemente que el aprendizaje va ligado a la emoción, y la neurociencia respalda este enunciado. Por ello, pondremos el foco en avivar esa emoción para que el niño recupere su interés y sus ganas de aprender.

Nosotros/as entendemos que mucho más.

A nivel académico, trabajamos con los mismos contenidos que cualquier escuela homologada, pues es el requisito de la Conselleria d’Educació. Sin embargo y además de eso, pensamos que los niños y niñas no deben aprender solo contenidos o competencias. Pensamos que debemos prepararlos para la vida. Y prepararlos para la vida significa para nosotros/as, potenciarles la autoestima, su propio autoconocimiento, la gestión de sus emociones, la autonomía, la responsabilidad, el trabajo cooperativo, la empatía, el respeto por el medio ambiente y por los que le rodean, entre otras muchas cosas. Además, el hecho de no trabajar con la metodología memorística sino experiencial, integramos los conocimientos de manera VERDADERA Y DEFINITIVA.

 

La educación no es la simple adquisición de conocimientos, ni coleccionar y correlacionar datos, sino ver el significado de la vida como un todo.

Jiddu Krishnamurti, pensador i escritor hindú

Sin ninguna duda. Diríamos que muy preparados. Trabajamos para que el niño o la niña que quiera, pueda.

Desde pequeñitos/as estamos trabajando la autonomía, el autoconocimiento y la responsabilidad (entre otras muchas cosas). El objetivo de ello es que, en primer lugar, sepan lo que quieren hacer. Cuando un niño/a sabe lo que quiere hacer y ha trabajado la responsabilidad, le va a ser más fácil trabajar hacia ello.

 

Como acompañantes, nosotros/as ponemos todos los medios para que su objetivo final se vea realizado. Desde la tutorización en la etapa de primaria, y desde los talleres de orientación profesional a partir de 1º de ESO.

Dedicamos los dos últimos años del alumno/a en Arimunani, es decir, Bachillerato, a preparar su próximo paso académico o profesional sea cual sea su elección. Si su deseo es hacer las pruebas de la EBAU, las preparamos junto a él o ella haciendo un seguimiento muy cercano y exhaustivo y dotándole de la confianza y autoestima necesaria para afrontar este nuevo reto.

Más que evaluar, lo que hacemos es asegurarnos de que tienen adquiridos los contenidos académicos.

 

Realizamos una evaluación continua del desarrollo de cada niño o niña. Nuestro principal instrumento de registro es la PLATAFORMA. Se trata de una herramienta ideada por nosotros mismos para plasmar la individualidad de cada alumno en su dimensión social, emocional y cognitiva, así como la adquisición de los contenidos curriculares a su paso por talleres, proyectos y ambientes. 

 

Toda la información está estructurada en ítems y queda registrada y almacenada en la plataforma, lo que nos permite en todo momento saber dónde está cada niño en su proceso de aprendizaje y desarrollo. Además, proporciona unas gráficas de porcentajes de adquisición del aprendizaje de cada materia. Obtener esta información tan detallada nos sirve para evaluar tanto de forma individual al alumno, como al grupo/clase, al ciclo y al centro educativo. 

 

Cuando los alumnos están preparados se les propone pasar por un RETO. Un reto es una actividad pensada para poder aplicar un determinado aprendizaje y ver si lo hemos integrado. En secundaria estos retos pasan a llamarse EXÁMENES, pero su evaluación no es numérica sino cualitativa. En bachillerato estos exámenes ya no se diferencian con los de el resto de centros educativos o institutos y están pensados para confluir con la educación tradicional a la hora de seguir estudiando cuando abandonemos Arimunani.

 

Nuestras “notas” sobre un contenido van desde “no adquirido”, pasando por “en proceso de adquisición”, hasta “adquirido”. Trimestralmente se ven reflejadas en un informe de evolución que es entregado a las familias.

Existen dos tipos de informes. Uno que es escrito por los acompañantes y otro que es un registro académico.

 

En el primer caso, todos/as los/as acompañantes detallan en un informe el desarrollo académico, emocional y social del niño o niña.  Es un informe único e irrepetible, extraído de la mirada amorosa de los miembros de nuestro equipo. Es una recopilación de momentos y vivencias que ha podido observar en su valiosa tarea de no solo mirar, sino también VER a los alumnos y alumnas. Es un informe rico en detalles, extenso y muy personalizado.

 

En el segundo caso, se ven detallados todos los contenidos académicos del ciclo y el curso en el que el niño/a se encuentra y el estado de adquisición de cada ítem (adquirido, en proceso de adquisición o no adquirido)

Nuestra forma de entender una escuela se basa en la confianza, entendimiento y trabajo conjunto entre tres participantes: la familia, el/la niño/a y la escuela.

 

La escuela existe porque las familias depositan la confianza para llevar a sus hijos/as. Y la escuela existe para satisfacer una necesidad de las familias y de la sociedad. De esta manera, es necesario que entre todas las partes exista una verdadera confianza, comunicación y trabajo.

 

Con ello, los niños y niñas aprenden sobre un sistema sano y coherente, lo cual, facilita la integración de normas, el aprendizaje, etc.

Siempre decimos que nuestra puerta está abierta para poder venir a manifestar cualquier inquietud. No somos perfectos y entendemos que podemos mejorar en muchas cosas. Escuchamos, reflexionamos, dialogamos y damos respuestas a todas las cuestiones.

 

Con ello, tratamos de evitar los corrillos, las habladurías, etc. que tanto daño hacen a las escuelas, cuando lo verdaderamente importante es solucionar problemas.

 

Mantenemos una comunicación fluida vía mail con todos los aspectos que se van dando en la escuela.

 

Además de ello, cada mes, llevamos a cabo un foro familiar (presencial o vía videoconferencia) donde desde Dirección, se exponen temas de interés general y las familias participan.

Proponemos tres tutorías con los/as acompañantes a lo largo del curso, una por trimestre. Con ello, tratamos de que exista un verdadero contacto y trabajo conjunto en el desarrollo del niño/a en todas las dimensiones. Además de las tutorías, las familias se pueden comunicar vía mail con los acompañantes y, si lo necesitan, tienen a su alcance otro tipo de reuniones con la coordinadora de etapa o la coordinadora pedagógica si fuera necesario.

Además, en varias ocasiones durante el curso, llevamos a cabo las reuniones que llamamos Acompañando-T . Se trata de es una reunión informativa voluntaria con la coordinadora pedagógica y la coordinadora de etapa para tratar temas de interés educativo, académico y emocional de cada grupo en concreto. Estas reuniones sirven también para resolver dudas y propuestas que puedan tener las familias, para nosotros una parte indispensable del proyecto.

Faqs