Es la primera gran elección de nuestras vidas. Una elección que hacemos ya como personas (casi) adultas y que empezará a dibujar nuestro futuro profesional. Aunque para algunos es muy fácil tomar esta decisión porque saben desde hace tiempo a qué quieren dedicarse, para otros es un momento de gran estrés e indecisión. Además, aunque en esta etapa los adolescentes ya empiezan a acercarse a la estabilidad física y emocional, todavía colean en ellos muchos interrogantes. Por ello, en Arimunani nos enfocamos al máximo a acompañar esta etapa de forma muy cercana e individualizada, con ratios muy disminuidas para preparar juntos el vuelo de este precioso y colorido colibrí.
Nuestro trabajo en esta etapa es preparar el acceso hacia su próximo plan educativo o profesional, sea el que sea. Trabajamos muy cerca del alumno para empoderarle y hacer de espejo para que tome conciencia de la persona extraordinaria en que se ha convertido. Hemos trabajado juntos todos estos años para PREPARARLE PARA LA VIDA, que sea capaz de tomar decisiones, de conocerse a sí mismo, de expresar lo que siente, de organizar ideas, realizar propuestas, llegar a conclusiones… Solo tenemos que hacerle creer en él o ella como lo hacemos nosotros mismos desde el día que entró por nuestra puerta. Vamos a preparar durante dos años tu vuelo para que sea un éxito. Y el éxito no es otro para nosotros que llegues a donde te propongas, y que seas FELIZ.
En la etapa de los 16 a 18 años, el cerebro se encuentra en un proceso de maduración significativa, especialmente en el lóbulo prefrontal, lo que implica que las capacidades de toma de decisiones, control de impulsos y pensamiento lógico aún están en desarrollo. Esta etapa se caracteriza por una alta plasticidad cerebral, lo que facilita la adquisición de nuevas habilidades y la adaptación a diferentes entornos de aprendizaje.
El sistema de recompensa dopaminérgico está hiperactivo, lo que impulsa la búsqueda de experiencias novedosas y el aprendizaje basado en recompensas inmediatas. Además, se observa una mejora progresiva en las funciones ejecutivas, como la atención, la memoria de trabajo y la autorregulación emocional, aunque no están completamente consolidadas.
Dado que los adolescentes aprenden mejor a través de experiencias sociales e interactivas, es fundamental implementar estrategias pedagógicas activas que involucren el aprendizaje colaborativo, el pensamiento crítico y la reflexión metacognitiva.
En bachillerato trabajamos con una metodología que se asemeja mucho a la educación tradicional en cuanto al funcionamiento y objetivos. Lo que cambia es que lo hacemos desde el enfoque que nos caracteriza que es el cuidado y el acompañamiento emocional de los adolescentes.
Tenemos un tutor especialista en cada bachillerato que guiará su proceso de forma individualizada hacia la selectividad, la universidad, la formación profesional o el grado formativo que el alumno elija como próximo paso en su vida académica y/o profesional.
Funcionamos con ratiso muy reducidas que hacen posible este planteamiento.
Ofrecemos los siguientes bachilleratos:
Igual que en las etapas de infantil, primaria y secundaria, sigue existiendo como órgano de cohesión, de toma de temperatura del grupo. Es un espacio de toma de decisiones, de resolución de conflictos y, en definitiva, un espacio para compartir emociones. No obstante, ya no tienen lugar de forma diaria, pues nuestros quehaceres en esta etapa son más abundantes, y más exigentes, y ya tenemos la capacidad de autorregularnos sin necesidad de usar este espacio con tanta asiduidad.
Los ambientes desaparecen para convertirse en TI (espacio de trabajo independiente). Son conducidos por un acompañante especialista en un área. Los niños y niñas que acudan a este TI por ejemplo de química, o de matemáticas trabajarán de forma autónoma esa materia pudiendo resolver dudas con el acompañante en cuestión y finalizar tareas y proyectos pendientes. En Bachillerato los TI son más escasos que en la etapa de secundaria porque su horario está enfocado a otras asignaturas más específicas de su especialidad.
Los TD, por otra parte, siguen siendo los talleres que ya conocen de sus etapas anteriores en la escuela. Es una propuesta educativa dirigida. Se centra en una actividad concreta pensada para trabajar un contenido curricular en particular y para realizar un tipo de aprendizaje donde todo el grupo va a trabajar de manera unida, Abarcan todas las materias curriculares (ciencias, matemáticas, lengua, historia, educación física, etc.) y se complementan con otros contenidos de tipo más heterogéneo que tocan otras áreas del aprendizaje de una forma enriquecedora siempre centrada en avivar la curiosidad y la sed de aprender que los jóvenes llevan de serie por su condición.
Realizamos una evaluación continua del desarrollo de cada niño o niña. Nuestro principal instrumento de registro es la PLATAFORMA. Se trata de una herramienta ideada por nosotros mismos para plasmar la individualidad de cada alumno en su dimensión social, emocional y cognitiva, así como la adquisición de los contenidos curriculares a su paso por talleres, proyectos y ambientes.
Toda la información está estructurada en ítems y queda registrada y almacenada en la plataforma, lo que nos permite en todo momento saber dónde está cada niño en su proceso de aprendizaje y desarrollo. Además, proporciona unas gráficas de porcentajes de adquisición del aprendizaje de cada materia. Obtener esta información tan detallada nos sirve para evaluar tanto de forma individual al alumno, como al grupo/clase, al ciclo y al centro educativo.
En bachillerato los exámenes ya no se diferencian con los de el resto de centros educativos o institutos y están pensados para confluir con la educación tradicional a la hora de continuar con nuestros estudios superiores cuando abandonemos Arimunani.